
En nuestro paseo por los distintos narradores, esta semana deseamos aproximarnos al narrador en primera persona. Ten en cuenta que ahora vimos al omnisapiente y al igual. Todavía nos quedan ciertos por ver, pero no podía concentrarme en ellos dejando fuera uno tan esencial como el narrador en primera persona. Ten en cuenta que siempre y en todo momento puedes entender mucho más sobre los narradores en nuestros tutoriales.
A este narrador se le llama narrador de adentro, para distinguirlo de los narradores en tercera persona. ¿Qué significa esto? Quiere decir que, en contraste a los narradores en tercera persona, los narradores en primera siempre y en todo momento van a estar en la historia, participarán de ella de alguna forma, no la reflexionarán desde fuera, sin intervención, sino van a estar en ella.
De qué manera comenzar a redactar un libro
No es la mejor forma de comenzar a redactar un libro de manera casual y después meditar en de qué manera agrupar esos extractos que nos pasaron.
Si no entendemos de qué manera redactar un libro, no obtendrás excelente resultados. Conque aquí hay ciertos avisos sobre de qué forma redactar un libro. En el momento en que hayas llegado a la última página, vas a sentir que la historia cobra pleno sentido, que es mucho más rica y profunda.
Redactar un libro sobre mi vida o de qué forma redactar una autobiografía
Tanto si decides redactar una autobiografía como una novela biográfica, debes trabajar la composición del libro como sucede con las novelas de ficción.
Si bien imaginemos momentáneamente que te has resuelto a redactar una autobiografía pues todavía tienes ese pensamiento imperial en tu cabeza “Deseo redactar un libro sobre mi vida”.
Virtudes de redactar en primera persona
La primera persona contribuye mucho más probabilidad a la historia. Esto puede ser bien difícil de comprender, ¿por qué razón algo dicho en primera o tercera persona sería mucho más veraz? Por exactamente la misma razón que una historia contada por alguien que la ha vivido es mucho más veraz que una versión contada por un tercero. La única forma de decirlo podría hacernos meditar que hay pequeños cambios o que nos encontramos oyendo una versión distorsionada.
Si el personaje primordial es un personaje atrayente, complejo, multifacético y bien construido, ha de ser él quien cuente la historia. El lector hallará mucho más atrayente lo que dice si puede sentir de qué manera el personaje primordial va mudando en todos y cada escena, mientras que revela lo que piensa o piensa especialmente cuando lo realiza y todo lo que pasa a su alrededor.
Emplea el lenguaje corporal
Siempre y en todo momento debemos tener precaución con el lenguaje corporal de nuestro personaje, y siempre y en todo momento debemos explotar todo cuanto logre trasmitir una señal sutil. Pero, en el momento en que contamos una historia en tercera persona y poseemos alguna independencia para perdernos en un personaje a lo largo de unas líneas, es bueno no emplear el lenguaje corporal. Es verdad que nuestras situaciones no se van a leer tan bien como podrían si asimismo usáramos este recurso, pero… solamente grave que eso.
Al usar la primera persona, por otra parte, este lenguaje corporal va a ser entre las escasas formas que van a tener el resto de individuos para decirnos lo que verdaderamente opínan sobre algo.