Bajo el apartado “Humor y también ironía de Tiburcio en las librerías”, Períodico Palentino ha reseñado la obra redactada por Julio César Izquierdo.
Lea la historia completa en este link o lleve a cabo click en la próxima imagen:
– Finalizar un libro
Para divulgar un libro, debe escribirlo primero, y no solo eso, escríbelo bien. Además de esto, ha de saber que debe finalizar el libro completamente antes de empezar a cometer fallos de publicación. Los editores jamás admitirían una obra inconclusa, y bastante menos un creador nuevo.
Escasas compañías administran contratos con autores consagrados para trabajos futuros, lo que puede ser una virtud o una desventaja. Ciertos escritores se comprometen legalmente con los editores a generar títulos cada período temporal, pero varios pasan por una época de página en blanco donde es bien difícil redactar solo una línea.
El escritor compás
Este género de escritor escoge la fórmula opción alternativa del primero que vimos. Como recomienda su nombre, no emplea un mapa, sino más bien una brújula: sabe de dónde viene y adónde desea ir, pero no sabe de qué manera va a llegar allí. Se dejará asesorar por su inclinación, pero eso signifique perderse ocasionalmente o no estar seguro del sendero. La trama está desarrollada en su cabeza y solo precisa dejar correr la tinta. La manera más óptima de detallar este procedimiento es llamarlo ensayo, puesto que el creador está regularmente ensayando y dejándose llevar por su intuición. Si bien, como editores, aconsejamos que los autores que han anunciado antes tomen esta ruta, pues puede ser un desastre para los recién llegados. Para estos, se aconseja que escriban con una guía al costado; De esta forma les resultará simple y practicarán a fin de que cualquier día no precisen ningún acompañamiento. Aun un escritor experimentado debe explotar los peligros que acepta como escritor de brújula. Vas a poder conseguir nuevos caminos, tomar novedosas direcciones, evaluar distintas ideas…
Al tiempo que el escritor de mapas y el escritor de brújulas tienen un hilo que atar, los escritores de antenas son los que se quedan absolutamente ciegos. No les agrada tener guías ni ideas preconcebidas de lo que va a ser su trabajo, con lo que solo confían en su inspiración. La mayor parte de las ocasiones estos autores no llegan a buen puerto. Si no tienen ideas fijas o no planean el emprendimiento grosso modo, tienen la posibilidad de olvidarlo, no dedicarle bastante tiempo o tener fallos de rigidez.
Comunidades
Y aquí las comunidades son indispensables. Los editores observarán su huella digital. Y se debe tener precaución con esto.
Cuantos mucho más seguidores poseas, mejor, si bien asimismo es esencial dirigir a tus seguidores y poder hacer contenido que les interese.