Como te comentamos, un colchón bastante blando puede dañar el cuello y ocasionar mal de espalda, más que nada en casos de patologías como la escoliosis lumbar o huesos mucho más débiles, como en la situacion de la gente mayores. Del mismo modo que un colchón bastante blando no es bueno para la espalda, un colchón bastante duro puede ejercer mucha presión sobre nuestro cuerpo, hacernos sentir incómodos y hacer una posición poco natural para la espalda que puede crear problemas en un largo plazo, en especial para los que duermen de lado.
¿Sabes exactamente en qué ocasiones un colchón duro es el más destacable colchón para la espalda y el cuello? Bueno, para gente mucho más pesada, por servirnos de un ejemplo.
El más destacable colchón para el mal de espalda: géneros de jergones según la solidez
Un óptimo colchón es la base para un reposo de calidad, aparte de eludir el mal de espalda. La clave para seleccionar un colchón para el mal de espalda es escoger el que se ajuste de manera perfecta a tu fisiología, para esto tienes que tomar en consideración las especificaciones que te enseñamos en el punto previo. No obstante, cuál es la diferencia para cada género de colchón. Te enseñamos sus especificaciones a fin de que logres conseguir el más destacable colchón para el mal de espalda:
- Jergones de muelles: Son mucho más resistentes y no ceden al peso. Es un colchón sugerido para personas con un enorme complejo o para personas con sobrepeso. La solidez de este colchón es superior al resto, esto se origina por las distintas capas que cubren los muelles y su resistencia.
- Jergones de espuma AD: Son jergones fabricados con espuma de Alta Resiliencia. Son jergones que aportan una solidez media. En consecuencia, es una alternativa muy aconsejable para personas que duermen de lado y mayores que no tienen sobrepeso. Los jergones de espuma AD proponen menos transmisión que los jergones de resortes.
- Jergones de látex: Los jergones de látex son entre las opciones mucho más recomendadas para personas con inconvenientes de mal de espalda. La razón de o sea que dan un increíble nivel de soporte merced a la flexibilidad natural del material. Esto afirma uniformidad y tranquilidad satisfactorio al utilizar este producto. Este colchón tiene una solidez media.
- Colchón viscoelástico: Se puede añadir viscoelástico a los jergones de muelles ahora los jergones de espuma HR. Es una alternativa muy habitual. En dependencia de la proporción de viscoelástica añadida al colchón, puede ser de solidez media o baja.La viscoelástica está desarrollada para achicar los puntos de presión en la espalda y las piernas. Son una alternativa muy aconsejable para personas mayores que pasan un buen tiempo en cama por inconvenientes musculares o articulares. Además de esto, esta clase de colchón absorbe realmente bien los movimientos, con lo que son aconsejables para camas de matrimonio.
Tejidos sugeridos
La viscoelástica tiene la propiedad de amoldarse a la manera del cuerpo, recobrando rápidamente su forma original en el momento en que por el momento no se aplica mucho más presión. Se amolda sin hundirse, sin hallar ninguna presión, pero no se siente que el colchón se cubre, lo que deja posiciones antinaturales.
Los jergones viscoelásticos tienen múltiples capas.
Virtudes de los jergones duros
- Bueno para la salud: al achicar y impedir el mal de espalda, la gente que duermen no solo adquieren un colchón, sino más bien algo que va a mejorar su calidad de vida.
- Según nuestro estudio, el 63% de los españoles elige reposar en jergones duros por el hecho de que les da una sensación de mayor tranquilidad y calidad de reposo.
- Para personas que duermen mucho más de cien kg es especial, puesto que contribuye mucho más durabilidad y la sensación de hundimiento no va a ser tan frecuente que puedes hallar en jergones de solidez media
- <li aria-level: "Tienen la posibilidad de sentir que están mucho más recios y que sienten que están mucho más recios y no les incentiva bastante: ". calidad del sueño, esto tiende a suceder más que nada en jovenes.
Solo o en pareja
No es exactamente lo mismo ser el dueño de la cama que poder reposar en el medio y tener únicamente una mitad para reposar. En este sentido, lo destacado es seleccionar una cama amplia y extensa, a fin de que los dos tengan el espacio preciso para reposar y no incordien a la pareja. Por otra parte, el peso aplicado al colchón es mayor, con lo que hay que poseerlo presente en la selección para eludir el “efecto primicia” y que el colchón desaparezca en el medio. Asimismo hay que meditar que se reflejan los movimientos de cada uno y eludir que no se note toda vez que da un giro nuestro compañero.
¿Quién no recuerda las viejas camas de alambre de hierro que mantenían los jergones hace unos años? Por suerte, en este momento es simple localizar somieres con perfección amoldados a cada colchón y a cada individuo, pero hay que tomar en consideración que, aparte de sugerir seguridad, si ponemos un colchón nuevo sobre un somiere que se ha desfigurado por la utilización, el colchón copiará los defectos del soporte. Por consiguiente, si observamos que el sofá o el somier está dañado, es preferible obtener uno nuevo asimismo.