La crema humectante y el hidratante son 2 géneros de modelos para el precaución de la piel que con frecuencia se confunden entre sí. Si bien los dos están diseñados para otorgar humedad a la piel, hay algunas diferencias clave entre ellos:
¿De qué manera sé si necesito una crema calmante?
Las cremas suaves son idóneas para tratar los inconvenientes de la piel seca. Es en especial recurrente en casos de psoriasis, eczemas o dermatitis atópica puesto que causan resequedad en la piel.
Las cremas emolientes te asistirán a aliviar esta sensación y calmar el picor y el enrojecimiento de la piel. Si tu piel es vulnerable a agrietarse o descamarse, terminantemente precisarás una crema facial calmante para eludir inconvenientes de piel seca.
Grasa
Si se desea humectar la piel del cuerpo sin dejarla grasosa se tienen que emplear cremas ligeras, emulsiones y lociones. Las clases de piel grasa se tratan mejor con geles o humectantes a partir de agua.
Gracias a la inclinación del acné, hay cremas que hidratan ligeras y aceites favorecedores, singularmente con elementos como propóleos, niacinamida y ácido salicílico.
Humectantes compuestos
Llevan substancias bioactivas como nuestros Omegas 3, 6, 7 y 9 como distintas vitaminas A, B, C, D, Y también, F, K, oligoelementos, aminoácidos y sales minerales metabolizables de calcio, zinc, hierro, fósforo entre otros muchos. Aparte de ácido fólico, tiamina, piridoxina, riboflavina…
Principios basados en biomateriales del ecosistema natural de flores, plantas, raíces, algas y frutos, que suponen considerablemente más bioactivación que aditivos externos que no se usan.
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Tan esencial como la diferencia entre humidificar y también humectar, es entender cuándo y de qué manera hacer cada desarrollo.